El drenaje linfático manual, es una técnica de tratamiento que además de resultar muy relajante, tiene como finalidad disminuir la inflamación y la retención de líquido en cualquier parte del cuerpo, pero especialmente en las extremidades.
Está especialmente indicado:
En pacientes que sufren linfedemas, bien sea primarios o secundarios. Uno de los más comunes son los que aparecen tras mastectomía por cáncer de mama, pero también son frecuentes tras cirugías de cáncer de ovario, útero, vejiga y próstata.
Por otra parte, el drenaje linfático es recomendable tras cualquier cirugía y en caso de traumatismo o lesiones que produzcan edemas (retención de líquido).